Komsenso somos Enrique y Alberto, dos ingenieros y una idea: acercar las ventajas de la tecnología y la digitilización a un sector orgulloso de su saber hacer artesano, el vino.

El proyecto, que nace de la amistad con una enóloga en busca del dominio preciso de la fermentación, fruto de aquella amistad ha venido un conocimiento profundo del proceso de producción del vino, una curiosidad creciente por la magia de la fermentación del vino y la constatación de la importancia de un control exhaustivo y detallado.

La creación de un vino es un proceso complejo y sutil que combina ciencia, técnica y arte. Nuestra misión en Komsenso es dar a los enólogos herramientas que permitan centrarse en la creación, mientras la máquina mejora seguridad, costes e impacto medioambiental, para apuntalar el futuro de la tradición.

Hemos desarrollado tanto estrategias y programaciones personalizadas para una bodega, o para un determinado proceso de una bodega, como soluciones estandarizadas. 

Entre las últimas está nuestro niño mimado, Enobot, un sensor que monitoriza y envía en tiempo real densidad, temperaturas, cinética fermentativa y niveles dentro del depósito, ahorrando tiempo y dinero a cambio de un control preciso y constante.